Con el fin de reivindicar sus derechos y exigir una bajada de impuestos –combustibles, luz, gas, alimentación-, cientos de solaneros acompañaron a los profesionales del sector en la concentración que ha tenido lugar en la Plaza Mayor de La Solana. Se leyeron varios manifiestos donde se defiende que “es una lucha de todos y por todos”.
Juan Alfonso Moya, transportista y en representación de la plataforma, dio lectura a un manifiesto dirigido a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez Jiménez. En este se hacían llegar las peticiones, como por ejemplo, que tienen que hacer frente a las facturas del gasoil, salarios “y estamos al borde de la quiebra”. También se quiso dejar claro que no están vinculados con la ultraderecha, “eso es totalmente falso, somos una organización totalmente apolítica”, aclaró Moya.
También, las hijas de un transportista solanero, Loli Trujillo, Pili Torres, y la nieta Yaiza Fernández, quisieron expresar su malestar con la situación. De este modo, Loli Trujillo, dejó bien claro que todos los concentrados en la Plaza Mayor “no son criminales, ni violentos, ni radicales de extrema derecha como los intentan catalogar”. Asimismo se informó a todos los presentes en la concentración que son padres de familia, asfixiados por los impuestos excesivos del gobierno.
Por parte de Pili Torres, recordó como cuando en pandemia y nadie podía salir de casa, “ahí estuvieron los transportistas”, solos en las cabinas de sus camiones y con la responsabilidad de abastecer a todo un país, “así lo hicieron y no nos defraudaron”. De igual manera, Torres habló de la vida de un transportista, enumerando entre otras cosas que, son los que duermen en una litera de 60 centímetros en cualquier área de servicio (en el mejor de los casos), y dónde su último pensamiento son sus familias, y que a la mañana siguiente no les hayan robado o agredido. Son los que sacrifican su vida y la de sus familias, por todos los que dependen de su trabajo.
La pequeña Yaiza Fernández, nieta también de transportista, se dirigió a los asistentes alegando que “la ministra le quiere pisotear el cuello, si, estos camioneros tienen hijos pero también nietos”. La niña apuntó que también se sufre por no tener a los abuelos cerca y que están solos en las cabinas de sus camiones.
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